Bocas negras llenas de rejas,
labios arborescentes de maldad.
Últimos estertores
que resuenan tras la música.
El destino aguardará paciente,
escondido entre las faldas de alguna romanza,
castigando pájaros negros
que buscan entre la carroña
lo hermoso que ambicionan en sus negras vidas.
Bocas sucias que venden humo,
el velero de la muerte lamerá sus palabras
impidiéndoles rozar otro corazón limpio.
Ojos condenados a la soledad,
cementerios desnudos,
torres océanas entre la multitud,
contemplando el desfile de espectros
desbordando su mundo de mentiras
entre flores muertas.
Ali Avila©
El dolor te desgarra por dentro aún?
ResponderEliminarYa no existe dolor. Fue duro pero como todo en la vida, se curó con el tiempo y una buena disposición por mi parte.
EliminarGracias por preguntar, pero dado que mis sentimientos están al descubierto, no estaría de más que al menos su nombre también lo estuviera. Respondo a un anónimo por cortesía dado que ha tenido el detalle de leerme. Ahora, complételo dándose a conocer. Seguro que muchos de los que leen estos comentarios estarán también encantados de conocer su identidad.
Muchas gracias de antemano.