Tus actos viven en ti
a veces los acaricias,
otras, la vida te los arranca
dejándote huérfano.
En tus ojos vive la luz que te aconseja,
que te gobierna el paso.
Tu corazón anda,
tu boca siente,
tus alas bogan etéreas hacia su fulgor.
Si la duda se apodera de ti
luchas, peleas con tus besos.
No deseas dudar más.
Ya viviste allí y regresaste.
Y volviste del infierno
renovado,
fortalecido,
VIVO!
porque destronaste a tus fantasmas,
los vestiste del revés.
Ahora te espera un anhelo
el deseo de una vida nueva,
sencilla y limpia.
Te espera una sonrisa clara,
una mirada fresca en el espejo
muchas dulces primaveras
un noble abrazo
y un sonoro despertar.
Te espero yo.!
Ali Avila©
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