Pequeño arco-iris incandescente,
sutil fulgor derramado
sobre la armadura despiadada
de la soledad.
Luminosa y recatada
ante la tentación,
abrigada en el recuerdo
de sus besos de mar.
Oculta por la misma sombra
sagrada y secreta
que los separa y los une.
Enigmática en su cauta atmósfera
silenciosa y rítmica
en la memoria de su perfumado recuerdo.
Corza blanca
serena
anclada a tierra firme,
renacida en su fuerza de luz.
Sedosa y dulcemente acunada
por las alas de un esperanzado destino.
Ali Avila©
Portrait of a young woman (detail) 1869,Pierre Auguste Cot. |
Bella, bellissima.
ResponderEliminarParece una Diosa.
ResponderEliminarBesos.
Poco comunicativa últimamente! ¿El amor se fue?
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