La frágil tranquilidad de una mujer
herida de amor,
tiene siempre una silueta de lágrimas azules
y la desolada tristeza de su mirada
envuelve cada suspiro de marengo abandono.
NOCTURNA OSCURIDAD
Cada latido cabalgó de la mano
hacia melodías hermosas
que recordaban lo que guardaban
las paredes seguras de mi espera.
El deseo escondido,
oculto tras puñaladas de decepción.
La pasión estallada
bajo el escudo ofrecido.
La resignación de la vida
y el anhelo de sobrevivir dentro de mi,
en la moldeable habitación de mis sueños.
La tempestad y la calma,
tras cada compás.
La ausencia del miedo acompañada,
y el irrevocable temor a la pérdida.
Y en todo momento,
mi corazón,
oferente y dócil,
calmando embestidas e irreductibles celos.
Amando mientras avanza la vida,
sin respuesta
!Qué oscuridad nocturna!
empujada a la soledad cálida de una pasión clandestina.
!Qué nocturna oscuridad!
olvidada entre las sábanas blancas de una pasión prohibida.
Ali Ávila@
Parece que últimamente te maltratan el corazón. Niña cambia de novio.
ResponderEliminarPerdone, pero esto es solo prosa poética.
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