viernes, 30 de diciembre de 2016

VACÍO ETÉREO

Hoy noté al despertar un vacío. Mis pensamientos me habían abandonado.  Mi cabeza no lograba retenerlos. Y volaban.  Danzaban en el aire. Podía verlos frente a mi.
Sentí un gran alivio, como si retornara a un estado salvaje donde no tuviera que rendir pleitesía a ningún estamento.  Un estado en el que la muerte y la vida solo eran conceptos y no realidades.
Como si se hubieran descargado de mi mente pesados objetos que llevaran años acumulando polvo y luz en mi cerebro.
Un sueño en el que perseguía cicatrices y recolectaba desgarros ajenos.
Un vacío etéreo y frágil,  falto de emociones, de trazos prolongados, de notas graves.  Un lugar donde podía ser yo sin ser.
Ali Avila@

3 comentarios:

  1. Me fascina como logra llevar al lector de la mano hacia ese mundo tan personal que muestra en cada texto. Magnífico!.

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  2. Así se forjan los grandes. Doman la realidad para convertirla en ficción. Llegará lejos, señorita.

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    Respuestas
    1. Pretender llegar es una ilusión, lo que realmente deseo es mantener siempre el deseo de seguir escribiendo. Muchas gracias por sus comentarios.

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